la primera

No es una bienvenida propiamente dicha, pero esta entrada merece ser la primera de todas.

El cumple del viernes? no se imaginan.
estuvo excelente al principio, la idea era beberse la vida y quedar deshechos y felices, y sobre todo: brindar por estar solteros. esa era la consigna.
iba bien, hasta que nos fuimos, al salir del boliche había un carrito de hamburguesas, empezamos a comer y luego todo se fue a la damier...
la cumpleañera no toleró los altos niveles de alcohol y el viento frío, e inició uno de los más fabulosos escándalos que se pueda presenciar en esta vida.

ya sea por celos, borrachera o cosas guardadas, tuvo su catarsis (quién fuera ella!) y los demás presenciamos uno de esos extraños hechos que nos pone a prueba el buen talante, la paciencia y el carácter.  inició una maratón a las 330 de la mañana de vestido y tacos, tuvimos que perseguirla si queríamos algún día volver a verla entera y no en los cartones de leche...

luego de inmovilizarla contra una reja, la subí a un taxi mientras el novio se quedaba shockeado con tal espectáculo.  excelente material para un cortometraje, la verdad? debo estar traumada con el fenavid, porque lo veia todo en cámara lenta y lo encuadraba como en una cámara.

la metimos en un taxi mientras ella gritaba mil cosas que tenía guardadas Dios sabe desde cuándo.  como exigía irse sola, la seguimos en otro taxi.  solo para que una cuadra después le pida al chofer que alguien la acompañe.

mandé al novio. pero éste estaba fuera de sí de impresionado.  además, no sabía llegar a mi casa y no iba a dejar que vaya a la suya para que su madre la vea en ese estado.  me subí yo entonces, y ahí entendí que una amiga no suple al novio.  me tiró un SEÑOR puñete, lapo, sopapo, golpe, bastonazo, trancazo, porrazo, estacazo, guantazo o como le llamen.  y luego estrelló su celular en mi cara, de nuevo cámara lenta y colores vívidos (por si aún no se dieron cuenta yo también estaba bajo los efectos del señor alcohol) y me pareció una excelente toma la del celular partiéndose en incontables partes al chocar contra mi pómulo.  cámara lenta.... croma. se requiere un celular con suficientes partes desarmables para utilería, efectos de sonido inmejorables, iluminación tenue, y un buen extra dispuesto a moretearse el rostro.

luego de esa secuencia al mejor estilo Matrix, en la que la cámara hace todo un travelling de 360° alrededor del rostro desencajado y golpeado, desperté del sopor y del aturdimiento.  la volví a inmovilizar esta vez acostada contra mis piernas, mientras ella se largaba a llorar a lágrima viva.

detonante? alcohol.
contenido? toda una vida de reprimirse y no decir lo que piensa
lema? cuando digo lo que siento
material 100x100? definitivamente.

cómo no sucedió antes, no?

resultado? pómulo moreteado e hinchado. y todos me preguntan "delicadamente" si mi novio abusa de mí.